Helado con AOVE
Durante este verano se ha hecho viral el verter AOVE sobre determinados sabores de helado…
Concretamente, tal y como compartíamos en nuestras redes sociales el pasado 7 de septiembre, el helado de vainilla con AOVE y sal gruesa ha triunfado en la creación de contenido…
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Pero, ¿Qué tiene de especial aplicarle AOVE al helado? ¿Qué conseguimos con ello?
El aceite de oliva virgen extra (AOVE) se utiliza en el helado por varias razones:
1. Mejora de la textura: El AOVE aporta una textura más cremosa y suave al helado. Al ser una grasa saludable, ayuda a que el helado se mantenga más suave, incluso cuando está congelado, evitando la formación de cristales de hielo grandes.
2. Realce de sabor: El aceite de oliva tiene un sabor distintivo, que puede agregar un toque interesante al helado, especialmente si es de alta calidad. Su sabor afrutado o ligeramente amargo puede complementar o contrastar con otros sabores del helado.
3. Equilibrio entre dulzor y acidez: El AOVE puede equilibrar el dulzor del helado con su toque amargo o picante, haciendo que los sabores sean más complejos y menos empalagosos.
4. Mejor absorción de los aromas: Al ser una grasa, el AOVE ayuda a que los sabores y aromas se perciban mejor, intensificando los ingredientes adicionales del helado, como frutas, chocolate o frutos secos.
En resumen, el AOVE no solo mejora la textura del helado, sino que también aporta una profundidad de sabor y un balance que lo hace más interesante y refinado.
¿Cuáles son los sabores con los que mejor combina?
El aceite de oliva virgen extra (AOVE) combina muy bien con varios sabores de helado, especialmente aquellos que equilibran su perfil afrutado, amargo o picante. Algunos de los mejores sabores de helado para combinar con AOVE son:
1. Helado de vainilla: La suavidad y dulzura de la vainilla resaltan las notas afrutadas y herbales del AOVE, creando un contraste delicioso.
2. Helado de chocolate: El chocolate oscuro, en particular, combina bien con el AOVE, ya que la riqueza del cacao contrasta con el sabor terroso y afrutado del aceite.
3. Helado de cítricos: Sabores como el limón, la naranja o la mandarina complementan muy bien el AOVE, ya que los matices cítricos refuerzan las notas frutales y frescas del aceite.
4. Helado de frutos secos: Sabores como el pistacho, la avellana o las almendras maridan bien con el AOVE, ya que ambos ingredientes comparten notas ligeramente amargas y terrosas.
5. Helado de miel o caramelo salado: La combinación del AOVE con sabores dulces y salados, como la miel o el caramelo, es ideal porque el aceite equilibra el dulzor con su toque amargo y ayuda a suavizar los sabores intensos.
6. Helado de yogurt o queso: Sabores ligeramente ácidos como el yogurt griego o el queso ricotta pueden beneficiarse del toque afrutado y cremoso del AOVE, creando un contraste interesante.
Estas combinaciones realzan las características del AOVE, aportando complejidad y un toque gourmet al helado.
Esperamos que os haya resultado interesante nuestro artículo y que probéis algunas de las combinaciones que os proponemos.
