Ventajas del Aceite de Oliva frente al Aceite de Girasol

La oferta y la demanda son el único mecanismo de regulación de precios del Aceite de Oliva.

El calor y la falta de lluvia están provocando que los mercados no sean optimistas de cara a la producción de la próxima campaña. https://www.olimerca.com/noticiadet/sube-el-precio-del-aceite-de-oliva-un-10-en-una-semana/091ba27a4ff709a0eda72aed254aed0e. En consecuencia, el aceite de oliva ha visto afectado su precio y muchos consumidores encuentran refugio en el aceite de girasol.

Pero, ¿cuáles son las principales diferencias entre el aceite de oliva y el aceite de girasol? ¿El aceite de girasol supone un riesgo para la salud?

Los dos son grasas vegetales con un porcentaje de materia grasa superior al 99% y ambos no son perjudiciales para la salud: son ricos en vitamina E y lípidos.

El aceite de girasol se extrae por prensado de las pipas de girasol. Mediante disolventes orgánicos (hexano) se obtiene un aceite que después se refina. En el aceite de girasol son más abundantes los ácidos grasos poliinsaturados (principalmente linoleico).

El aceite de oliva se extrae de la oliva mediante procedimientos mecánicos. En el aceite de oliva predominan los ácidos grasos monoinsaturados (en especial el oleico). El aceite de oliva presenta múltiples ventajas sobre el aceite de girasol:

  • Mayor composición de polifenoles. Los polifenoles ayudan a combatir los radicales libres por su función antioxidante, lo que se traduce en protección frente a enfermedades degenerativas, deterioro cognitivo, Alzhéimer…
  • Reduce la incidencia de complicaciones cardiovasculares (infarto de miocardio e ictus).
  • Efectos positivos sobre la obesidad y la diabetes.
  • Acción antiinflamatoria.
  • Acción reguladora de grasas y colesterol.
  • Ayuda a prevenir y tiene efectos positivos sobre  distintos tipos de cáncer…

Principales desventajas del Aceite Girasol:

Temperatura:

El aceite de girasol, es un aceite rico en ácidos grasos poliinsaturados, altamente inestables.  Se trata de un tipo de ácido graso que se oxida, se altera, se enrancia con mucha facilidad.

La presencia de ácidos grasos poliinsaturados en los aceites, hacen que se formen sustancias peligrosas para la salud, cuando éstas se utilizan para cocinar, y especialmente cuando se alcanzan temperaturas muy altas y/o se reutilizan.

Dichas sustancias son 4-hidroxinonenal, crotonaldehído, acrilamida y acroleína o malonaldehído. Se trata de elementos tóxicos que causan problemas digestivos y están relacionados con patologías como cáncer, enfermedades cardiovasculares, Alzehimer o Parkinson.

Sabor:

Como hemos visto, consumiéndolo en frío y de forma moderada el aceite de girasol podría ser incluso beneficioso para la salud. En este sentido, también gana la partida el aceite de oliva y ya no solo por el componente “salud”, si no por sus características organolépticas. Su olor y sabor hacen que no tenga sentido el consumo en frío del aceite de girasol.  

En conclusión, el aceite de girasol no supone un riesgo para la salud, siempre y cuando no se reutilice y no se sobrecaliente. El aceite de oliva es el más beneficioso presentando múltiples ventajas sobre el aceite de girasol.